
Fiesta de La Candelaria
2 de febrero

La Gran Diosa Madre se restablece después de alumbrar al sol del año nuevo. Es tiempo de celebraciones, en torno a la siguiente invocación:
"Augusto Señor de la Muerte y la Resurrección,
de la Vida, y dador de Vida;
Señor de nosotros mismos,
cuyo nombre es misterio de misterios;
anima nuestros corazones;
haz que la Luz cristalice en nuestra sangre,
colmándonos de resurrección,
pues no hay parte de nosotros que no sea de los Dioses.
Te rogamos que desciendas sobre tu sierva y sacerdotisa
y te hagas visible."
La celebración concluye con el Gran Rito.